Mi nombre es Mónica Corvera. Nací en Madrid y nunca tuve contacto con la fabricación de joyas, digamos que empecé como autodidacta.

Mi interés apareció cuando me fijé en que todas llevábamos y nos regalábamos los mismos pendientes, anillos, collares y pulseras.

Siempre me han podido las ganas de conocer y descubrir. En este caso saber cómo se fabricaban esas joyas que llevábamos todas. Y así empezó todo hace ya diez años.

Primero con la bisutería y de ahí a un taller de joyería durante dos años.

Empecé a crecer sin dejar de aprender rodeada de diseño y artesanía, ver nacer una joya cada vez me gustaba más.

Conseguí inmortalizar momentos especiales en cada pieza. Había llegado mi momento.